Poda de un manzano columnar: diagrama y reglas para modelar árboles para principiantes
Los manzanos columnares son una solución ideal para parcelas pequeñas. Ocupan poco espacio, prácticamente no tienen brotes laterales y una copa amplia, y su rendimiento puede superar en ocasiones al de los frutales tradicionales. Sin embargo, incluso estos árboles requieren poda regular, tanto para darle forma como para su mantenimiento.
Contenido
Formación correcta de un manzano columnar: ¿por qué es necesaria?
Existe la idea errónea entre los jardineros de que los manzanos columnares no necesitan poda porque carecen de brotes laterales. Sin embargo, si así fuera, la poda no sería un problema. Un manzano columnar adecuado tiene un tronco recto y erguido con brotes acortados, también llamados estolones. Estos se ubican en un ángulo agudo con respecto al tronco principal. Formar los estolones es necesario para evitar que el árbol se convierta en un típico manzano enano con una copa estándar.
En manzanos con forma columnar incorrecta, el rendimiento disminuye significativamente.
La poda de un manzano columnar es necesaria no solo para mantener su apariencia estética, sino también para evitar que las ramas se enreden, aumentar el rendimiento de la fruta, rejuvenecer el árbol y fortalecer las ramas jóvenes.
Esquema general para la poda de un manzano columnar
Primero, es importante comprender la estructura general de un manzano columnar. El brote central, también conocido como tronco, no se poda ni acorta, ya que desempeña un papel fundamental para todo el árbol. Desde este brote central, se extienden brotes laterales de primer y segundo orden. Los brotes de primer orden son principalmente horizontales, mientras que los de segundo orden se extienden verticalmente hacia arriba y hacia abajo.
Desde el tronco principal también pueden extenderse brotes verticales de primer orden.
El esquema de poda para un manzano columnar es el siguiente:
- Durante el primer año de plantación, se podan todos los brotes hasta dejar dos yemas. Esto fortalece las ramas y estimula su posterior crecimiento y floración.
- En el segundo año, se podan los brotes de primer orden entre 30 y 35 cm. Los brotes verticales de segundo orden se dejan intactos, dejándolos para que sigan dando fruto.
- En el tercer año y siguientes de vida se repite la poda del segundo año, siendo también objeto de eliminación los brotes que dieron fruto el año anterior.
El crecimiento del brote central se limita pellizcando la parte superior solo si su altura supera los 2,5-3 m.
Un árbol maduro de 5.º o 6.º año no requiere una poda más extensa. Solo se requiere mantener la copa, evitando que las ramas se entrelacen, y realizar podas sanitarias regulares, eliminando los brotes enfermos, viejos y marchitos.
Épocas de poda
El momento de la poda de estos manzanos depende de la variedad, el clima regional y el clima del año en curso. El modelado de la copa del manzano se puede realizar en cuatro etapas: una por cada estación.
Poda de un manzano columnar en invierno
La poda de invierno se considera la parte más importante del cuidado de un manzano columnar. Es recomendable realizarla a finales de febrero, si es posible. En esta época, todas las ramas y brotes del año anterior son claramente visibles. Debido a la forma del manzano, las ramas inferiores reciben poca luz en primavera y verano.
En invierno, las zonas de fructificación se forman eliminando las ramas inferiores, dejando las superiores para los manzanos. Al mismo tiempo, se eliminan las ramas viejas y rotas, así como los brotes débiles, ya que debilitan el árbol y reducen la floración posterior.
Esquema de poda de primavera
La poda de primavera se realiza antes de que la savia comience a fluir durante el período de deshielo activo. Tras la poda de invierno y primavera, los manzanos columnares crecen más rápido y aumenta la cantidad de flores y frutos.
Se recomienda dejar de 4 a 5 yemas en cada brote, lo que producirá la misma cantidad de brotes nuevos. Este tipo de poda se denomina pinzado y su objetivo principal es estimular la aparición de brotes fructíferos.
También en primavera se eliminan las ramas que se han congelado durante el invierno, lo que contribuye a la salud general del árbol y aumenta su resistencia a los ataques de enfermedades y plagas.
A finales de primavera y principios de verano, se eliminan los brotes laterales en crecimiento para regular el número de ramas en la copa. Esto es necesario para asegurar que los nutrientes se utilicen para la formación de frutos y no para el crecimiento de brotes vacíos que no florecen.
Esquema de poda de verano
Durante el verano, solo se podan los brotes verdes nuevos, maduros pero innecesarios, que aún no han formado flores ni ovarios. Estos brotes suelen crecer en el tronco central. Estos brotes simplemente se arrancan, ya que sus troncos son muy delgados y no requieren poda.
El pinzado o hijastro de verano de un manzano columnar debe realizarse con cuidado para no dañar la corteza del tronco principal y los brotes de primer orden.
Poda de manzanos columnares en otoño
La poda de otoño se realiza para dar forma a los pocos brotes más fuertes del árbol. En esta época, se eliminan las ramas secas y cruzadas, los brotes rotos y los que presentan signos de infección o daños por plagas. Eliminar esta madera muerta ayudará al árbol a sobrevivir el invierno con mayor facilidad. En otoño, también se elimina el nuevo crecimiento que surgió en verano tras la eliminación de los brotes laterales.
Se recomienda realizar la poda de otoño cuando haya cesado el flujo de savia, sin olvidar tratar las heridas grandes. parcela de jardín.
Existen varias reglas sencillas para la poda sanitaria:
- Todos los brotes que se van a podar se eliminan casi hasta la base, dejando 0,5 cm del tronco.
- Las zonas cortadas se cubren con brea de jardín o pintura al óleo.
- La poda se realiza con instrumentos desinfectados.
Características de la poda
Los manzanos columnares deben entrenarse desde el primer año de plantación y continuar durante toda la temporada. Cuanto más viejo sea el árbol, menos frecuente será este tratamiento. En árboles jóvenes, es importante preservar la yema apical o terminal, responsable del crecimiento del tronco central.
Los daños causados por heladas o plagas inhibirán el crecimiento del núcleo del manzano mediante brotes jóvenes y yemas posteriores. La yema apical solo puede eliminarse en árboles maduros que alcancen una altura de 2,5 a 3,5 m.
Si la yema apical se congela, es necesario identificar la rama que se convertirá en la continuación del tronco. Para ello, se elimina la porción del tronco principal que contiene la yema muerta hasta el brote nuevo. Las ramas restantes, a la altura del brote central nuevo, se acortan a dos yemas.
Los principales errores que se cometen al podar manzanos columnares son:
- tocón demasiado largo o demasiado corto después cortar escapar;
- uso de instrumentos contundentes que dañan la corteza y la madera;
- utilizando herramientas no tratadas después de podar árboles enfermos;
- No tratar heridas grandes con desinfectante y descuidar la masilla variedad de jardín.
Para lograr el corte perfecto, debes seguir algunas reglas sencillas:
- La dirección del corte es desde la base hacia la punta y en dirección opuesta a la yema.
- Cortar Se realiza dos dedos por encima del riñón.
- El corte debe ser suave, sin rebabas ni mellas en la corteza, para lo cual sólo se utilizan herramientas bien afiladas.