Tome las verduras previamente preparadas y lávelas bien con agua tibia, luego séquelas con toallas de papel.
Lava la fruta, córtala en cuartos y quítale el corazón. Si las manzanas son pequeñas, puedes dejarlas enteras.
Luego pelamos el ajo.
Prepare frascos limpios y previamente esterilizados y coloque en ellos las especias y los dientes de ajo.
A continuación, presione con cuidado los tomates y las manzanas, alternándolos con cuidado.
Hervir la cantidad necesaria de agua y verterla en un recipiente, dejar reposar un rato.
Luego, vierte el agua en una cacerola, añade sal, azúcar y vinagre, y vuelve a hervir. Se recomienda usar un vinagre más suave; si usas vinagre de mesa, dilúyelo con agua en una proporción de 2:1.
Vierta agua en frascos y ciérrelos con tapas.
Déjelo en un lugar cálido durante 24 horas, después de lo cual puede guardarlo para el invierno.