Prepare todos los componentes necesarios.
Lavar bien las ciruelas, cortarlas por la mitad y quitarles el hueso.
Coloque las ciruelas en una olla, agregue agua y cocínelas al vapor bajo una tapa hasta que estén blandas.
Frote el puré caliente a través de un colador.
Lavar bien las manzanas, pelarlas, quitarles las semillas y cortarlas en rodajas.
Coloque las manzanas en un recipiente de acero inoxidable, cúbralas con una tapa y cocínelas hasta que se ablanden.
Pasar nuevamente el puré caliente por un colador.
Mezcle la mezcla de ciruelas con la mezcla de manzana.
Cocine hasta que espese, revolviendo bien.
Añade azúcar granulada. Hierve la mermelada hasta que esté lista.
Para comprobar si está listo, vierta una pequeña cantidad de la mezcla en un plato de vidrio frío. Si la gota no se extiende, no mantiene su forma y se endurece al enfriarse, detenga la cocción. El tiempo de cocción de la mermelada no debe exceder los 45 minutos.
Vierta la mermelada caliente preparada en frascos esterilizados, pero no los cierre; déjela hasta que se endurezca y se forme una costra en la superficie.
Cierre bien los frascos y consérvelos en un lugar fresco y seco.