Mermelada de manzana y pera
Conservar mermelada de pera y manzana para el invierno es una de las recetas de conservas más populares. La mermelada se puede usar en diversos postres, untar en bollos o pan blanco, o simplemente disfrutar con té. Prepararla no es muy difícil; la clave está en abastecerse de la fruta adecuada.

Mermelada de manzana y pera
Ingredientes
- 1 kilogramo peras
- 1 kilogramo manzanas
- 1 kilogramo Sáhara
- 1 uds. limón
Instrucciones
- Primero, prepara la fruta. Enjuágala bien con agua corriente y luego retira el exceso de humedad con una toalla.
- El limón también debe lavarse bien y retirarse la cera con un cepillo suave. A continuación, se corta en trozos (no es necesario pelarlo).
- A continuación, pela las manzanas y las peras, quítales el corazón y las semillas. Corta las frutas en trozos.
- Después, coloca toda la fruta picada en un recipiente limpio y mézclala bien. Después, colócala en una picadora de carne y pásala por ella (la de rejilla mediana es la mejor).
- Se mezcla la cantidad seleccionada de azúcar con el puré de fruta preparado y luego se deja reposar durante media hora para que la fruta suelte suficiente jugo y el azúcar se disuelva ligeramente.
- A continuación, pon el puré de fruta y el azúcar en una cacerola y caliéntala a fuego lento (como si estuvieras preparando mermelada). Cocina la mermelada a fuego lento durante 60 minutos. Remueve de vez en cuando y retira la espuma que se forme en la superficie. Si quieres una mermelada más espesa, puedes cocinarla más tiempo.
- La mermelada caliente terminada se coloca en recipientes secos y limpios y se cubren con tapas.
Nota
- No se deben usar frutas verdes para hacer mermelada. Su textura es demasiado densa para producir un puré suave.
- Las frutas dañadas y con gusanos se deben recortar de antemano para evitar que se estropee el plato terminado.
- Puedes usar diferentes variedades de fruta para la mermelada. La variedad de sabores realzará el postre.
- No hay consenso sobre cómo pelar las manzanas y las peras. Las recetas tradicionales indican pelarlas, pero algunos prefieren dejarlas para conservar al máximo sus vitaminas. Si preparas un postre para niños, por supuesto, hay que pelarlas.
